Externalidades y campañas políticas

CARLOS EDUARDO AMÉZQUITA Columnista La Nación

23. febrero 2010

Estamos a escasos días de las elecciones presidenciales y corporativas en nuestro país, el 14 de marzo de 2010. Los candidatos todos, políticos, hombres y mujeres, quienes gestionan el Estado Social de Derecho participan del libre juego democrático, transitan el apenas perceptible terreno de la legitimidad, la congruencia y la coherencia.

Nuevamente, la confrontación de todo tipo, ideas, tesis, carteles, campañas y multimedios, están al orden del día, esperando de los ciudadanos un compromiso mayor con la sociedad. Una campaña política también incluye esfuerzos para alterar y mudar de aires las prácticas políticas, cambiar la política o ideología de cualquier institución, etc.
Es aquí donde se aprecia la principal debilidad de las campañas porque en general siguen los mismos estereotipos tradicionales y esquematizados, como si las cosas no cambiaran. Se espera que en esta oportunidad, quizá por primera vez, las prácticas políticas se ajusten a la crítica realidad que vivimos y cambien.
En una obra de ciencia ficción, el escritor norteamericano Isaac Asimos (1) define a la política como "el arte de lo posible en el reino infinito de las necesidades", perfila la complejidad de todo quehacer político: sortear una cantidad impresionante de variables para lograr algunos avances en la estructura social.
El irreverente cómico Groucho Marx (2) definió a la política como: "El arte de buscar problemas, encontrarlos, hacer un diagnóstico falso y aplicar después los remedios equivocados". Por supuesto, Groucho es humorista, no politólogo. También es cierto que una caricatura no es la realidad. Pero esta definición paradójica de la política tiene un toque realista, creo.
Cada vez resulta más difícil y exigente orientar campañas y proselitismo político en Colombia. Los acontecimientos que transcurren en la vida de los colombianos, sus necesidades cada vez mayúsculas, en el tema de nuevos empleos, las oportunidades de negocio y de trabajo que están por desarrollarse, la oferta de capital para invertir es escasa, la riqueza está maniatada y fuera del país, la crisis ambiental arredra, el narcotráfico crece, la guerra y la violencia parecen de no acabar, la corrupción se destapa, delincuencia y desplazamiento forzado son evidentes, la pobreza ya va por más del setenta y pico por ciento, la economía del Huila sigue de penúltima a nivel nacional ¿cómo podemos ser felices? Esto parece una comedia.

(1)Asimov (en ruso А́йзек Ази́мов) (1920–1992) fue un escritor y bioquímico ateo, judío nacionalizado estadounidense, nacido en Petróvichi, en la entonces República Socialista Soviética de Bielorrusia. Exitoso y excepcionalmente prolífico autor de obras de ciencia ficción, historia y divulgación científica.

(2)Groucho Marx (Nueva York 1890 - Los Ángeles 1977) fue actor, comediante y escritor estadounidense.

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