Matemáticas y cultura

CARLOS EDUARDO AMÉZQUITA
Ninguna otra matemática ha tenido tanta consecuencia en la cultura y en el arte como la “teoría de la relatividad”. No sólo provocó ruptura en el ámbito científico al cambiar las bases de la mecánica clásica de Galileo y Newton, sino que alteró el pensamiento occidental.
Ortega y Gasset (filósofo español) dijo: “la teoría de Einstein es una maravillosa justificación de la multiplicidad armónica de todos los puntos de vista. Extiéndase esta idea a lo moral y a lo estético y se tendrá una nueva forma de sentir la historia y la vida”.
Después que Einstein presentara su relatividad, Picasso pudo pintar “Las señoritas de Avignon”, obra que rompió los confines de la perspectiva visual al sintetizar todos los puntos de vista en uno.
Pierre Francastel (Paris 1900 – 1970) gran figura de la sociología y la Historia del Arte Contemporáneo definió las matemáticas y el arte como los mayores polos del pensamiento humano.
El doctor Mogens Niss de la Universidad de Roskilde (Dinamarca), responsable matemático del informe Pisa de la Ocde, advierte en 2005: “la democracia es una broma si los ciudadanos son analfabetos en matemáticas. La política no son palabras, son números y, al final, sólo se puede juzgar en los números. El ciudadano que no entiende los presupuestos públicos es pasto de la verborrea de los políticos”.
¿Cómo enseñar y aprender matemáticas para que nuestros ciudadanos desarrollen y fortalezcan la cultura?
Hipótesis: Se debe engendrar la pasión por el cambio desde las aulas, calles y hogares, “aprendiendo a desaprender” para luego “aprender a aprender”, regularse a si mismo y construir “estrategias de pensamiento”. Esto exige diseños didácticos y prácticas en la que ciudadanos ejerzan la matemática y su concordancia lúdica con la conciencia política, la ética y la toma de decisiones.
“Es indudable que las matemáticas se relacionan con el desarrollo del pensamiento racional (razonamiento lógico, abstracción, rigor y precisión). Esencial para el desarrollo de la ciencia y la tecnología, pero además puede contribuir a la formación de ciudadanos responsables y estructuras sociales democráticas” (Min-Educación Nacional).
Propuesta 1: Que en el Parque de los Niños de Neiva se tenga un tablero de ajedrez gigante, fichas de 1 metro de altura y torneos permanentes, y otros juegos didácticos que estimulen el pensamiento estratégico de los ciudadanos.
Propuesta 2: Impulsar los “carnavales matemáticos” en el marco del cincuentenario festival folclórico. Que al compás del sanjuanero se pueda recrear un espacio pedagógico que promueva el aprendizaje y el interés por las matemáticas.